Las huellas digitales y de carácter importan
En una época en la que casi todos los candidatos tienen una huella digital, el proceso de contratación ya no se limita a los currículums, las entrevistas y la verificación de referencias. Proyección de redes sociales —revisar el contenido en línea compartido públicamente por un candidato— se ha convertido en una poderosa herramienta para descubrir la adecuación entre el carácter y la cultura. Sin embargo, muchos gerentes y ejecutivos de recursos humanos siguen indecisos. Este libro blanco aborda la resistencia común a las redes sociales y a la debida diligencia en línea en la contratación, desmiente los mitos sobre su legalidad y demuestra por qué evaluación del carácter mediante la evaluación digital es esencial para construir una cultura laboral sólida, segura y productiva.
Exploraremos ejemplos reales de empresas que sufrieron no investigar adecuadamente a los candidatos, resaltar las dificultades de un enfoque de bricolaje y mostrar cómo el costo de una mala contratación o de un empleado tóxico supera con creces el esfuerzo de una selección exhaustiva. El objetivo es hacerte partícipe de una narrativa que sea a la vez cautelosa y alentadora, que ilustre los riesgos de ignorar el comportamiento de los candidatos en Internet y las ventajas de adoptar como norma la selección de los candidatos en las redes sociales, obediente práctica de contratación.
A pesar de la ubicuidad de las redes sociales en nuestras vidas, la adopción formal de la evaluación de las redes sociales por parte de los líderes de recursos humanos ha sido lenta. Una encuesta realizada por Sterling a mediados de la década de 2010 reveló que solo 5% de las organizaciones reconoció abiertamente el uso de la información de las redes sociales en las decisiones de contratación. Muchos expertos creían que esta cifra no se divulgaba suficientemente: los gerentes de contratación probablemente consultaban Facebook o LinkedIn «de manera clandestina», pero las políticas de recursos humanos no lo aprobaban oficialmente.
¿Por qué la duda? Los profesionales de recursos humanos citan una combinación de preocupaciones legales, éticas y culturales:
Los líderes de recursos humanos temen que mirar las redes sociales de un candidato pueda exponerlo a información sobre características protegidas (por ejemplo, raza, religión, discapacidad, estado de embarazo) que es ilegal tener en cuenta a la hora de contratar. Una vez que «vea» dicha información, no podrá dejar de verla. A algunos también les preocupa infringir las leyes de privacidad de datos (como el RGPD europeo) y los requisitos de la Ley de Información Crediticia Justa (FCRA) en los EE. UU.
Sin embargo, ninguna ley de ningún país de la OCDE prohíbe rotundamente a los empleadores revisar el comportamiento público en línea de un candidato.
Más allá de la legalidad, algunos profesionales de recursos humanos piensan que es éticamente ambiguo revisar la vida personal o las opiniones de una persona fuera del trabajo. Sin embargo, en el mundo conectado de hoy, la actividad de un empleado en las redes sociales públicas es un reflejo de su reputación y valores profesionales.
A pesar de que existe orientación, el mosaico de regulaciones puede resultar confuso. Muchos líderes de recursos humanos erróneamente creen que la simple visualización de perfiles públicos es ilegal. En realidad, ¿qué es está prohibido hackear cuentas privadas o basar las decisiones de contratación en características protegidas.
Uno de los mayores conceptos erróneos que frenan a los recursos humanos es la idea de que los controles de las redes sociales son una especie de área legal gris o incluso descarada. ilegal. Dejemos las cosas claras:
Nivel de puesto: costo de rotación (% del salario)
Nivel de entrada: 30%
Nivel medio: 50%
Nivel superior: 100%
Ejecutivo: 200%
Como se muestra en esta tabla, los costos de rotación aumentan significativamente con la antigüedad. Esto refuerza la necesidad de mejores decisiones de contratación por adelantado.
Las organizaciones que no evalúan el comportamiento en línea de los candidatos se exponen a un riesgo significativo. Aquí están estudios de casos del mundo real de las empresas que sufrieron:
Muchos gerentes de contratación intentan proyección de redes sociales «hágalo usted mismo», pero esto crea más riesgos:
Área de impacto: aumento estimado del costo (%)
Pérdida de productividad: 15%
Aumento de la facturación: 54%
Riesgos legales: 80%
Daño a la reputación: 35%
Una contratación tóxica no solo afecta a una persona, sino a infectar a toda una organización.
Sustituir a un empleado implica costos tangibles e intangibles:
Invertir en la selección de personajes ahorra dinero evitando las malas contrataciones y fomentando una cultura más saludable.
La presencia online de un candidato puede ser ventana a su personaje. La evaluación puede ayudar a los equipos de recursos humanos a:
La contratación no consiste solo en evaluar las habilidades, sino en garantizar que cada contratación mejore la cultura de la empresa.
La evaluación de las redes sociales es ya no es opcional. Un solo tuit ofensivo puede costarle el trabajo a un ejecutivo. Una contratación violenta puede poner vidas en riesgo. El costo de no la evaluación es simplemente demasiado alta.
Al implementar una evaluación ética y estructurada de las redes sociales, los líderes de RRHH pueden:
Los profesionales de RRHH deben abogar por la debida diligencia digital—no como «espionaje», sino como una herramienta estratégica y ética de gestión de riesgos.
El futuro de la contratación es claro: el carácter importa. Las huellas digitales importan. Es hora de que RRHH lidere el camino.